Beneficios del tomate frito
Beneficios del tomate frito: existen muchas formas de consumir el tomate y una de las formas habituales de consumo es el tomate frito, por su delicioso sabor pero es que además tiene muchos beneficios.
Estudios sobre los beneficios del tomate frito
Estudios han demostrado que los compuestos antioxidantes propios del tomate, como el licopeno, mejoran con la cocción, a altas temperaturas, es decir, evita que esta hortaliza pierda sus propiedades protectoras, especialmente durante la digestión.
La Universidad Politécnica de Valencia constató este hecho en su Journal of Functional Foods, investigación llevada a cabo por un equipo del Instituto de Ingeniería de Alimentos para el Desarrollo y el Centro Avanzado en Microbiología de Alimentos. Han constatado que los antioxidantes del tomate frito son más compatibles que los del tomate crudo con una de las cepas probióticas más usadas como suplemento para combatir problemas intestinales, la del Lactobacillus reuteri.
Y es que el tomate es una de las principales fuentes de antioxidantes en nuestra dieta diaria y que podemos consumirlo de diversas formas (salsa, crudo, zumo, frito…). De hecho, es una de las pocas fuentes que posee antioxidantes hidrosolubles (soluble en agua) y liposolubles (soluble en grasas o aceites) en grandes cantidades.
Beneficios del tomate frito
Sin embargo, el secreto reside en el tratamiento térmico del tomate, un proceso por el que también pasa el zumo de tomate comercial, ya que no solo lo liberamos de los microorganismos patógenos que podría tener en su forma cruda, evitando enfermarnos, sino que también conseguimos que se liberen muchas sustancias bioactivas, que nuestro organismo será capaz de absorber mucho mejor.
Aunque muchas recomendaciones nos advierten que tomemos alimentos frescos, pues cocinarlos hace que pierdan vitaminas y minerales, no ocurre lo mismo con el tomate, caso que funciona al revés, como ya hemos visto. Esas sustancias que aporta el tomate frito ayuda a que aumente el colesterol bueno (HDL) e impide que el colesterol malo se deposite. Por su parte, los polifenoles ejercen un efecto antiinflamatorio y antioxidantes, especialmente beneficioso para los deportistas, ya que el primer efecto ayuda a la recuperación de los músculos tras un esfuerzo o lesión, mientras que el segundo combate contra la acción de los radicales libres, que se liberan durante el ejercicio físico.
Como último apunte, si al tomate frito se le añade cebolla durante la cocción, será aún más beneficioso para nuestra salud. De hecho, muchos científicos coinciden en que el sofrito de tomate y cebolla es una de las mejores salsas que podemos consumir, ya que la combinación de estos ingredientes, cocinados al calor del fuego, interactúa a la perfección, aumentando la producción de isómeros del licopeno del tomate y sus derivados.
En Libby’s, ponemos a disposición de los consumidores nuestra tradicional Salsa de Tomate Frito, elaborada con los mejores tomates y manteniendo todos los nutrientes y beneficios característicos de esta preparación. Además, también incluye la cebolla entre sus ingredientes, lo que nos asegura una de las mejores combinaciones para nuestra salud que podemos encontrar en una salsa.