5 al día: beneficios para los mayores
5 al día
5 al día: Una dieta que incluya, al menos, 5 raciones de frutas y verduras al día, conlleva efectos beneficiosos para la salud de las personas de edad avanzada, que derivan de la propia composición nutricional de estos alimentos.
Por su escaso valor calórico y su alto poder saciante, las frutas y verduras son alimentos que facilitan el mantenimiento del peso corporal, previniendo la obesidad, patología que se ha relacionado con una mayor incidencia y peor pronóstico de muchas enfermedades de tipo crónico frecuentes en los ancianos como diabetes, enfermedades cardiovasculares, etc.
Por otro lado, el elevado contenido en agua de las frutas y hortalizas, favorece el estado de hidratación, lo que resulta de gran importancia en un colectivo como el de los ancianos en el que las mayores pérdidas de agua a través de la orina, la disminución progresiva de la sensación de sed y la disminución del contenido de agua corporal, asociadas al proceso de envejecimiento, determinan una mayor facilidad para la deshidratación.
Son igualmente alimentos imprescindibles en la dieta del anciano por su elevado contenido en fibra de buena calidad, la cual juega un papel determinante en la prevención y el tratamiento de diversas enfermedades con una elevada prevalencia en este colectivo.
Además, las frutas y verduras constituyen una buena fuente de vitaminas y minerales, lo que resulta fundamental en este grupo de población que presenta grandes dificultades para cubrir las recomendaciones de estos micronutrientes, debido tanto a los mayores requerimientos de algunos de ellos, como a los problemas de absorción, las menores necesidades calóricas, y a otros factores ligados al envejecimiento como el consumo de ciertos fármacos (que interaccionan con algunos micronutrientes, aumentando sus necesidades); y en el que las situaciones de déficit tienen consecuencias más graves que en otros grupos de edad.
Un aporte adecuado de vitaminas y minerales es esencial en las personas mayores debido a su implicación en la protección frente a enfermedades degenerativas, como el cáncer, enfermedades cardiovasculares y neurodegenerativas, cataratas, etc., y a su participación en el adecuado mantenimiento del sistema inmune, lo que va a repercutir en una menor incidencia de infecciones. Además, la alteración del sentido del gusto (causa importante de falta de apetito en el anciano) se ha relacionado con deficiencias en diversas vitaminas y minerales (vitamina A, B6, ácido fólico y zinc).
Tampoco hay que olvidar, que tanto las frutas como las verduras son asimismo buenas fuentes de diversos fitonutrientes: carotenoides, compuestos fenólicos (flavonoides, ácidos fenólicos, taninos…), monoterpenos, fitoesteroles, lignanos, tioles…compuestos a los que se les han atribuido potenciales efectos beneficiosos para la salud.
5 al día, para unos hábitos de vida saludable