Es muy común la circulación de mitos o leyendas urbanas, que damos por ciertas y no lo son. En el caso de los zumos comerciales suelen estar relacionadas con la pérdida de propiedades de las frutas al ser exprimidas y a su contenido en azúcar.
Veamos qué mitos son los más comunes y que tienen de ciertos:
Es más saludable comerse una pieza de fruta que tomarse un zumo y mejor uno exprimido en casa que uno comercial
El avance de la tecnología en el sector español posibilita hoy en día conservar las características nutricionales y organolépticas de los zumos y néctares, consiguiendo productos de la más alta calidad uniendo una materia prima de primer orden con las más avanzadas tecnologías en los procesos de producción.
Zumos comerciales asociados al sobrepeso y la obesidad
No hay ninguna prueba científica que relacione el zumo de frutas y la obesidad. Es más, en los últimos años ha disminuido el consumo de zumos de frutas y sin embargo las tasas de obesidad han ido aumentando.
Gran cantidad de azúcar presente en los zumos comerciales
Los zumos de frutas tienen la misma cantidad de azúcar que las frutas de los que proceden y no son azúcares añadidos posteriormente, ya que la legislación española (Real Decreto 781/2013) y comunitaria lo prohíbe.
Tanto la Organización Mundial de la Salud (OMS),como la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN),recomiendan el consumo diario de frutas y verduras. La Asociación 5 al Día, que promueve el consumo de frutas y verduras frescas, admite que una de las cinco raciones diarias recomendadas de frutas y verduras puede proceder de un zumo de frutas envasado comercial.
De hecho, los zumos comerciales constituyen un recurso habitual en las comidas o meriendas para mantener un estilo de vida saludable y una buena hidratación.