Consejos para cuidar el corazón
Según los expertos de la Fundación Española del Corazón, unos hábitos de vida saludables podrían llegar a prevenir hasta el 80 % de los infartos. Por eso resulta tan importante seguir una serie de consejos para cuidar el corazón y evitar factores de riesgo, como los hábitos de vida que favorecen las probabilidades de sufrir una enfermedad cardiovascular.
Con motivo del día mundial del corazón, que se celebra el 29 de septiembre, respondemos a tus preguntas sobre cómo cuidar tu corazón y evitar factores de riesgo.
Consejos para cuidar el corazón
Para cuidar la salud cardiaca, lo más importante es seguir una serie de consejos que nos permiten identificar y evitar los factores de riesgo cardiovascular más peligrosos:
- Evita el tabaco
- Controla la tensión arterial
- Vigila el colesterol
- Controla la obesidad
- Sigue una dieta saludable
- Vigila la salud de tus dientes
- Reduce el estrés
- Practica ejercicio de manera regular
- Respeta las horas de sueño
Evita el tabaco
El tabaco, tanto directa como indirectamente, provoca el 30 % de las cardiopatías coronarias y es responsable de más de 7 millones de muertes en todo el mundo.
Los efectos del tabaco en el corazón son:
- Elevar la frecuencia cardiaca.
- Aumentar la presión arterial.
- Endurecer las arterias.
- Provocar irregularidades en el ritmo cardíaco.
- Multiplicar por 3 el riesgo de infarto de miocardio o angina de pecho.
- En caso de haber sufrido un infarto, el tabaco multiplica por 3 el riesgo de sufrir otro.
Así es como afecta el tabaco en el corazón. Sin embargo, abandonar el tabaquismo te ayudará a evitar estos efectos antes de lo que crees. Solo dos años después de dejar de fumar se reduce ampliamente el riesgo de sufrir una enfermedad coronaria. Tras quince años, el riesgo es similar al de alguien que no haya fumado nunca.
Para tener un corazón saludable, evita el tabaco o abandónalo definitivamente.
Controla la tensión arterial
La tensión arterial es la fuerza que se ejerce contra las arterias y, por tanto, el esfuerzo que debe realizar el corazón para bombear la sangre. Cuanto mayor sea la tensión arterial, mayor debe ser el esfuerzo y mayor es el riesgo de daño en el corazón, el cerebro o los riñones.
Una tensión arterial alta es la primera causa de ictus y puede provocar angina de pecho o insuficiencia cardíaca.
La tensión en adultos debe estar entre 120 mm Hg y 80 mm Hg en reposo. Por encima de esta cantidad se considera una tensión arterial alta.
Por eso, la Sociedad Española de Hipertensión recomienda seguir una dieta mediterránea rica en verduras, legumbres, frutas y lácteos bajos en grasas, y practicar medio hora de ejercicio moderado al día para reducir la tensión arterial.
Vigila el colesterol
El colesterol es una sustancia necesaria para el correcto funcionamiento de nuestro organismo y que producimos de manera natural. Sin embargo, cuando nuestra sangre acumula demasiado colesterol, este puede llegar a obstruir las arterias, lo que provoca enfermedades cardiovasculares como un infarto de miocardio o un ictus cerebral.
Según la Fundación española del corazón, el colesterol debe situarse entre una serie de valores:
- El colesterol HDL (colesterol bueno) debe ser superior a 35 mg/dl en hombres y 40 mg/dl en mujeres.
- El colesterol LDL (colesterol malo) debe ser inferior a 100 mg/dl. Hasta 160 mg/dl se considera normal-alto y alto si supera esta cantidad.
- Los triglicéridos deben situarse por debajo de los 150 mg/dl. Por encima de 200 mg/dl es alto y muy alto si supera los 500 mg/dl.
Para bajar el colesterol, la Sociedad Española de Aterosclerosis aconseja evitar el sobrepeso, no fumar ni beber alcohol, practicar ejercicio de manera regular y seguir una dieta saludable, rica en frutas, vegetales y pescado.
Controla la obesidad
La obesidad o el sobrepeso suelen relacionarse directamente con altos niveles de colesterol y azúcar en sangre y con una presión arterial elevada, por ello son múltiples los problemas del corazón por obesidad, ya que es causa directa de trastornos cardiovasculares y otras enfermedades como dificultades respiratorias, mayor riesgo de fracturas, discapacidad o muerte prematura. Además, existen ciertos tipos de células grasas que producen sustancias inflamatorias que afectan directamente al tejido cardíaco.
Si quieres prevenir o reducir la obesidad, practica ejercicio de manera regular y sigue una dieta cardiosaludable.
Si necesitas ayuda, consulta con un profesional sanitario y no te dejes llevar por dietas de moda poco recomendables, recuerda que la mayoría de estas dietas milagro pueden ocasionar graves trastornos al eliminar alimentos esenciales para el organismo, y que una bajada de peso drástica tiende a generar un efecto rebote.
Sigue una dieta saludable
Una dieta saludable es el pilar sobre el que se sustenta un corazón saludable y es, además, la solución a casi todos los problemas que hemos visto hasta ahora.
Para reducir el riesgo cardiovascular y la mortalidad causada por dolencias cardiacas, sigue una alimentación basada en:
- Frutas beneficiosas para el corazón.
- Verduras.
- Pescado.
- Carnes magras.
- Legumbres.
- Aceite de oliva.
- Frutos secos.
- Alimentos con grasas saludables que deberías añadir a tu dieta
Varios estudios han confirmado que tomar una pieza de fruta al día puede reducir hasta un 34 % el riesgo de sufrir problemas cardíacos. Si tomas tres o cuatro piezas, estos beneficios se multiplican.
El té es otro gran aliado para la salud del corazón, ya que se ha comprobado que las personas que consumen una taza al día, al menos, disminuyen un 35 % las probabilidades de sufrir enfermedades cardiovasculares, ya que esta bebida previene contra los depósitos de calcio en las arterias.
Vigila la salud de tus dientes
Determinadas bacterias que se encuentran en la boca pueden acabar llegando al corazón. Una gingivitis, por ejemplo, es una infección de las encías que, si no se cura, puede derivar en una periodontitis, una enfermedad que afecta a los tejidos de soporte del diente y que puede extenderse hasta afectar a la circulación.
Para evitar que esto ocurra, cepíllate los dientes dos o tres minutos, dos veces al día, y visita al dentista cada año.
Reduce el estrés
Desde el año 2012, la Guía europea sobre prevención de enfermedades cardiovasculares considera el estrés como factor de riesgo cardiovascular. El estrés aumenta la tensión arterial y puede llegar a tener graves consecuencias para el corazón.
Se ha comprobado que situaciones intensas de estrés aumentan el riesgo casi un 10 % desde el momento en que se sufren hasta dos horas después. Estas situaciones de estrés aumentan la frecuencia cardiaca, la presión arterial, la coagulación de la sangre y el endurecimiento de los vasos sanguíneos, lo que resulta altamente perjudicial para el corazón.
Por eso te recomendamos que sepas qué tipos de estrés existen y cómo luchar contra ellos.
Practica ejercicio de manera regular
Los especialistas recomiendan 30 minutos de actividad física moderada 5 días a la semana para reducir los riesgos de enfermedades cardiovasculares.
Respeta las horas de sueño
El insomnio aumenta el riesgo de padecer un ataque al corazón. Las personas con problemas para conciliar el sueño tienen un 45 % más de posibilidades de sufrir un infarto, por lo que debes seguir unos hábitos regulares de sueño:
- respeta los horarios de acostarte,
- evita las cenas pesadas y
- practica ejercicio moderado durante la tarde que te ayude a conciliar el sueño con facilidad.
Conclusión
El corazón es la pieza fundamental de nuestro organismo. Un corazón en buen estado de salud nos ayudará a prevenir el riesgo de padecer un infarto y otras enfermedades cardiovasculares que son la primera causa de muerte en el mundo.
Los consejos para prevenir todos estos factores de riesgo cardiovascular se reducen a estas pautas:
- No consumas alcohol ni tabaco.
- Reduce el sobrepeso.
- Practica ejercicio moderado 30 minutos cada día.
- Sigue una dieta cardiosaludable, baja en azúcares, sal y grasas y alta en frutas, verduras, legumbres, cereales integrales y frutos secos.
- Controla el estrés y la ansiedad.
Si aun con estos consejos tienes la tensión alta, puede que seas hipertenso. En ese caso, tu médico te recomendará un tratamiento para controlarla con seguridad.
Con nuestros consejos para cuidar tu corazón, te asegurarás de conservar una vida más sana y durante más tiempo.